La mitad de las bajas laborales son causadas por problemas en músculos y huesos y entre los sectores más afectados encontramos el sector hostelero. Estas dolencias son padecidas por más de 40 millones de trabajadores europeos, por lo que la solución es inminente. Las alfombras antifatiga pueden ser la solución más práctica y eficaz, a continuación, hablaremos de algunos de sus beneficios conocidos.
El trabajo en el sector hostelero no es liviano y a menudo requiere estar de pie durante toda la jornada, hecho que puede hacer que nuestros huesos y músculos se resientan. El dolor de pies o piernas es la consecuencia más inmediata, pero la cosa puede complicarse si a largo plazo, se ven afectados rodillas, espaldas o cuello, que además pueden traer consigo problemas en la circulación.
Las alfombras antifatiga se alzan como la solución definitiva por sus múltiples ventajas. Además de reducir el dolor de espalda, piernas y el cansancio generalizado, tiene un efecto acolchado que no se desgasta a corto plazo. Su instalación es rápida y fácil y además, nos servirá como superficie antideslizante para evitar resbalones causados por vertidos líquidos. Entre sus beneficios encontramos también que reduce el ruido, es resistente hasta al fuego y en los utensilios que se caigan previenen roturas.
Las alfombras antifatiga son, en definitiva, una solución relativamente barata y con amplias aplicaciones prácticas. El modo más fácil de acabar con caídas indeseadas, bajas inoportunas y un equipo poco eficiente por cansancio.